Liderar el cambio a través de la colaboración
No hay colaboración a menos que se superpongan o entrelacen dos elementos: la conexión y la contribución, afirma Benito. No es necesario ir muy lejos para experimentar la colaboración en la vida diaria. Independientemente del contexto social o profesional, la colaboración tiene múltiples beneficios, ya sea para el bienestar o para lograr resultados positivos en el trabajo.
Hacer el esfuerzo de contribuir y conectarnos en un entorno de colaboración es conseguir reunir a personas con una variedad de habilidades y antecedentes culturales, con diversos puntos de vista, para encontrar las mejores soluciones a problemas complejos.
La colaboración nos habilita a liderar el cambio.
Exploremos esto más a fondo
Cuando le preguntaron a Viola Davis sobre el arte de interpretar con autenticidad respondió: “Yo tengo un proceso… y espero que otras personas también lo tengan… pero una de las cosas que hago cuando colaboro es, no importa lo que el [otro] actor me de, yo lo uso.”
Si le damos al conocimiento la atribución de masa (sustancia de cualquier tipo que cubre la teoría y la semántica) y conexión con la atribución de energía (el flujo de ideas, conocimiento, alegría o romance) hay un lugar donde podemos pescar la luz caída, una intersección donde ocurre la colaboración. Es decir, cuando la masa se encuentra con la energía y cuando el conocimiento se encuentra con mentes conectadas. (Ver Figura 1).
La fórmula detrás de colaborar con éxito
La colaboración puede ser el impulsor de valor detrás del éxito a corto y largo plazo.
Si simplemente te estás conectando con otro ser humano, sencillamente estás pasando el rato, lo cual es genial. Pero no hay verdadera colaboración a menos que estés contribuyendo con la otra persona en la búsqueda de un objetivo común.
Para comprender la segunda parte de la ecuación, debemos volver a cómo los matemáticos usan la prueba del teorema, que es buscar las condiciones necesarias y suficientes.
La contribución necesita una condición necesaria para suceder que es la existencia de conocimiento relevante (llamémoslo masa). También necesita una condición suficiente que es una conexión verdadera y sólida (llamémoslo energía) para provocar las combinaciones de lo nuevo, como lo describe Viola Davis en la cita anterior.
Ahora, hay una buena manera de entender esta superposición y es visualizando un proceso en forma de “T” donde la parte vertical de la letra refleja el conocimiento que permite la contribución y la parte horizontal, la energía que desencadena la conexión (Ver Figura 2).
“Si contribuyes te puedes quedar”
“Si contribuyes te puedes quedar” es un mantra interno, muy querido para mí. Ilustra el estado actual de nuestra red de colaboradores de manera muy clara, y también es un desafío. La colaboración es la cola secreta que une la responsabilidad colectiva con el ownership individual, un cóctel potente para el desarrollo de nuestro ecosistema Hyper Island.
Otras lecturas
La amistad de los físicos, Planck y Einstein se extendió más allá de tocar juntos el piano y el violín al ámbito de la física. Con la ecuación de la relatividad Einstein creó una relación entre masa y energía, mientras que Planck correlacionó la masa con la frecuencia. Finalmente, la masa y la energía están intrínsecamente relacionadas a través de la frecuencia, dado que la colaboración se basa en la frecuencia, una medida de desempeño un tanto prosaica.
El autor Alex Pentland, en su libro "Física social" puede ayudarte a profundizar en el tema de frecuencia.
Sobre el autor
Benito Berretta es Managing Director en Hyper Island Américas, padre de 5 hijos, hermano de 5 y sin certidumbre de lo que nos depara el futuro.